6 de junio de 2009

El Día D


Hoy se celebra con gran bombo el 65 aniversario del día D. Hitler esperaba ese día con ansiedad. Él predijo que el desembarco se produciría en Normandía o en Bretaña. Lo dijo el día 4 de marzo y lo repitió en otro discurso el día 20 de marzo. A pesar de que en el quinto año de guerra Alemania ya se encontraba exhausta, Hitler tenía esperanzas de que la coalición enemiga acabaría por deshacerse. Le dijo a Mussolini:

- En silencio, y sin demasiado trabajo, Norteamérica está despellejando viva a la Gran Bretaña, yla está dejando en la miseria a fuerza de préstamos. Si nos limitamos a estarnos quietos y a defender nuestro terreno, un día u otro se producirá la gran ruptura entre la Gran Bretaña y los Estados Unidos.

A pesar de los reveses militares de los últimos tiempos, Alemania aumentaba la producción de armamentos. No solo aumentaba la producción de tanques y aviones. Hitler confiaba también en el éxito de sus nuevas armas. Así pues, se lanzaron las primeras bombas voladoras sobre Londres. Hitler tenía muchas esperanzas en esas nuevas armas. Hitler dijo:

-Inglaterra quedará dominada por el terror. Estas bombas voladoras producen unos efectos tan desmolarizadores que nadie puede aguantarlas durante largo tiempo. ¡Voy a darles su merecido a esos bárbaros que han ametrallado a nuestras mujeres y a nuestros hijos, y que han atentado contra nuestra cultura!

El día 5 de Junio Hitler se acostó pasada la medianoche. En esos mismos instantes, una colosal fuerza enemiga navegaba rumbo a Normandia. A pesar de las advertencias de Hitler, el Muro Atlántico no estaba terminado para cuando comenzó la invasión. Como es bien conocido, la invasión, a pesar de que estuvo a punto de fracasar, condujo a los aliados hacia París y finalmente hasta la victoria. Un factor determinante de ese exito lo tuvo el espionaje y el contraespionaje. El propio Führer dijo que si la invasión no era rechazada la guerra estaría perdida.


Para esas fechas Hitler se encontraba ya muy agotado físicamente. En una entrevista con dos militares, el 31 de agosto de 1944, les dijo:


- Lucharemos incluso en el Rin, si es preciso. Eso es del todo indiferente. Mantendrémos esta batalla viva cueste lo cueste, hasta que uno de nuestros malditos enemigos se canse de luchar y hasta que consigamos una paz que asegure la vida de la nación alemana para los próximos cincuenta o cien años y que sobre todo, no vuelva a dañar nuestro honor por segunda vez, tal como sucedió en 1918.... si mi vida hubiera encontrado su fin, eso representaría para mi, en el terreno personal, una simple liberación de las preocupaciones, de las noches de insomnio y una grave enfermedad nerviosa. Es sólo una fracción de segundo, y no se queda libre de todo esto... Y aun así, quiero dar las gracias a la Providencia por haber permanecido con vida...

7 comentarios:

  1. Hola:

    Interesante blog. Le puse en mis "otros blog´s" para leerle poco a poco.

    Y no voy a ensalzar porque no creo en la política de la actualidad. No se preocupe por eso ;-)

    Salve Et Victoria! Un saludo.

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  2. Brighid: muchas gracias. En cuanto tenga un poquito de tiempo leeré también tu blog. Un saludo

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  3. Gran parte de la culpa de que triunfara el desembarco la tuvieron los señores de Inteligencia, que cifraban el número de divisiones enemigas en el doble de lo que era en realidad. Así, el Alto Mando pensaba que se mantenían un montón de divisiones en Inglaterra para efectuar un segundo desembarco en Calais y consumar el desastre.

    Se achaca a Hitler que no lanzó inmediatamente todas sus fuerzas a Normandía, pero si no lo hizo no fue por caprichos personales sino porque su espionaje no es que fuera malo, es que trabajaba contra él, con Canaris a la cabeza. Es uno más de los mitos sobre Hitler.

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  4. Efectivamente, los historiadores cargan contra Hitler toda la responsabilidad de la dirección de la guerra y esta perfectamente documentado que entre sus propias filas (Canaris a la cabeza) había muchos enemigos y le informaban mal. Pero es mejor presentar a un Hitler loco que lanza tropas a la muerte. Saludos

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  5. a pesar de tener dos frentes, tengo entendido que en las ardenas por poco devuelve a los aliados de nuevo al mar, me gustaria saber la verdad sobre esta batalla, ya que siempre se habla que fue dificil par los americanos entrar y que fueron miles los que se rendian,pero oficialmente le bajan mucho el perfil a esta batalla indicandola como solo una batalla complicada.
    Sigue adelante con tu blog, es muy importante a todos los que creemos que la historia esta llena de mentiras y los mitos llenos de verdad.

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  6. Bueno, en diciembre de 1944 Alemania estaba vendida.

    Podía elegir entre dos alternativas: distribuir sus fuerzas haciendo malabares entre los tres frentes que tenía (frente oriental desde Curlandia hasta el Adriático; frente de Italia; frente occidental) y esperar la ofensiva de sus enemigos. Las esperanzas eran pocas, porque los rusos tenían una superioridad de medios abrumadora, en hombres y material, y los aliados bombardeaban sin cesar sus ciudades, fábricas, refinerías, carreteras, ferrocarriles, etc. Era cuestión de meses que la resistencia alemana se derrumbara, si bien el tiempo en cierta manera jugaba a su favor, con diseños aeronáuticos revolucionarios y sobre todo con el submarino de la clase XXI que habría puesto patas arriba la navegación aliada. Y los aliados dependían por entero de los convoyes marinos, pero eso es otra historia.

    La otra opción era jugarse todo a una carta e intentar dar un golpe decisivo que cambiara el rumbo de la guerra. Esto difícilmente se podía hacer en el frente oriental, pues su inferioridad era demasiado clara y los rusos podían reponer sus pérdidas con facilidad. Pero esta idea no parecía disparatada en el oeste. Los aliados no eran tan superiores en número. Cierto que su superioridad aérea era total, pero Hitler confiaba en anularla atacando en mal tiempo, para lo cual llevaron al ártico expediciones meteorológicas, para máxima precisión.

    La idea era atacar en las Ardenas, entre los ejércitos ingleses (que estaban al norte, en Holanda) y los americanos (al sur, en Francia), llegar hasta la costa en Amberes, separar a los dos ejércitos y destruir al aislado en el norte, el inglés.

    Sin embargo, la distancia a recorrer era excesiva. Las divisiones alemanas eran, en su mayoría, de reciente formación, con un entrenamiento insuficiente y en ocasiones, un material defectuoso. La ofensiva debía llevarse a cabo sin apenas apoyo aéreo, y sobre todo, faltaba gasolina para una ofensiva de gran envergadura como aquella. A ésto se le suma la fortaleza de sus enemigos, ya que los americanos poseían abundante material de todo tipo, y una vez recuperados del shock incial, pudieron resistir la ofensiva sin dificultad.

    La ofensiva fue todo una sorpresa y desencadenó pánico al principio. Algunos miembros del Alto Mando se plantearon la retirada en algunos sectores, como en Strasburgo, incluso alguno habló de retroceder hasta París (!), pero rápidamente se controló la situación. Como nota curiosa, Hitler confiaba mucho más en las SS que en el Heer, y la ofensiva tuvo dos puntas e lanza, el 6º Ejército de las SS, dirigido por Diettrich, y el 5º acorazado del Heer, comandado por Manteuffel. Fue éste último quien avanzó más, de hecho el 6º se quedó bloqueado y apenas si pudo avanzar unos kilómetros, mientras que en el sur se avanzaron hasta 80km en algunos sectores.

    En cualquier caso, la ofensiva fracasó y tuvo efectos negativos en las escasas reservas que le quedaban a Alemania. La opinión de Rundstedt era una ofensiva limitada, con el objetivo de cercar el saliente americano en Aquisgrán (Aachen) mediante un ataque en Lieja y Maastrich, destruyendo buena parte de las fuerzas enemigas en ese sector. Las probabilidades de éxito de esta operación eran más elevadas, pues el terreno a conquistar era mucho menos. Pero Hitler consideraba este plan una "pequeña solución" que no alteraría sustancialmente el desarrollo de la guerra.

    Espero haberte aclarado un poco.

    Saludos.

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  7. Muchas gracias por tu aportación. Yo lo que veo es que, visto desde nuestra perspectiva, es muy fácil analizar la contienda. Desde luego, conociendo el resultado, es facil hacer análisis. Yo desde luego no creo que Hitler fuera un necio. Pero él no esta para contarlo. Todo lo contrario, un ejército de enemigos suyos se ha encargado de distorsionar la historia.Yo creo que no es cuestión de defenderle a ultranza, pero sí de respetar un rigor histórico que no existe con la IIGM.

    En 1944 por supuesto que Alemania estaba vencida. Pero Hitler contaba con otras alternativas para seguir alargando la guerra.

    Saludos!

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